martes, 3 de enero de 2012

"El silencio de los corderos" de Thomas Harris




Vi la película hace mucho tiempo. Recuerdo que me gustó mucho. Un gran thriller psicológico con su punto justo de violencia y gore.
Recientemente he leído el libro y me ha sorprendido el encontrar pocos matices más a los personajes dibujados en la película. El libro es, en cierto modo, algo vulgar. Escrito de una manera episódica con mucha menos tensión que la película y menos profundidad dramática en muchos momentos.

A destacar el que muchas veces consigue radiografiar como haría un buen psiquiatra a los personajes, sobretodo a Clarice. Algo que se logra en la película pero de una manera menos incisiva que el libro siendo uno de los pocos puntos en el que la novela mejora al film.

Pocas veces me ha pasado que prefiera la versión en celuloide de un libro. Pero esta es una de esas contadas ocasiones... y es entonces cuando vislumbras con más claridad si cabe el gran trabajo interpretativo de Hopkins. Su caníbal es mucho más estremecedor en la película que en el libro. Y ahí ayudó mucho el gran doblador que tuvimos en la versión española. La película no la he visto en VOS pero dudo que Hopkins entone con la maravillosa voz del doblador.


Quizás lo que más sobrecoge de "El silencio de los corderos" es los temas de que trata, todos ellos cercanos al horror y a las acciones más ilógicas realizadas bajo la falsa voz de la locura humana. Como enlazan todas las piezas del rompecabezas y eso nos hace vislumbrar qué pasa por la cabeza del asesino en serie que todo el FBI intenta atrapar... mientras Lecter aparentemente se nos muestra opaco. Y digo aparentemente porque creo que en el fondo sus motivaciones y defectos quedan patentes tanto en el libro como en la película si dejamos en un segundo plano todo el tema del canibalismo. Curiosamente poco mencionado en el libro y en la película, seguramente porque es un dato que enseguida queda grabado en la mente del lector y que siempre que aparece Lecter viene a nuestra memoria claramente como una espada de Damocles encima del personaje que en cualquier momento puede caer y despertar la locura.


El personaje femenino, Clarice, es bajo mi punto de vista el personaje más completo. Quizás porque al ser la protagonista, el hilo conductor es de quien se nos da más datos y a la que observamos prácticamente en toda la película.  Parte de una inocencia, de un ansia de ambición y progresión en su trabajo cercana a la obsesión pero que, a su vez, le permite acercarse al manipulador doctor Lecter sin dejarse arrastrar totalmente por su carisma innegable y su mente tortuosa que desea conocer y diseccionar a toda psique que se ponga a su alcance.

Un aspecto a destacar y que resulta enriquecedor e interesante es el buen trabajo de fondo del libro del que obviamente se nutre la película, tanto en los momentos de técnica forense, como en el campo naturalista mediante la investigación de las mariposas o las técnicas psiquiátricas en el intento de anticipación  y conocimiento del criminal.


Aunque para mí el libro flojea en términos puramente narrativos o novelescos. Prefiero el buen hacer del film en este sentido, ya que es un thriller de primer orden que sentó bases y precedentes en la historia del cine y que, en términos generales, superó a la novela.

"Quid pro quo "

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